Las calles de Paucartambo abandonan su sosiego habitual al aproximarse la fiesta el 16 de julio. Si muchos empiezan ganar el pueblo a partir de las diferentes localidades de la provincia otros devotos lo hacen desde otros puntos de la región del Cusco, e incluso del resto del país y el extranjero.  Al albergar una de sus más influyentes celebraciones religiosas se hace igualmente portadora de la idea de cultura hecha movimiento, colorido y devoción.

Las danzas en homenaje a la Virgen del Carmen de Paucartambo, condensan la historia colonial, republicana y contemporánea de la provincia. EL pueblo se consagra durante cuatro días a la realización, cuidado y supervisión de los rituales de la fiesta. Parte de estos eventos se encuentran encabezados por el Prioste o mayordomo del Cargo Principal y  19 grupos de danzantes con impresionantes vestuarios cuyas temática se pierden en los tiempos.